*AETHERIUS*
Mientras caminaba por el sendero note que todo este panorama fuera de la capital central la cual estaba llena de vida, por dónde sea que miraras había árboles, pequeños arroyos y campos de flores, algo que, aunque es normal en cualquier región es algo difícil de disfrutar por la vida salvaje y las bestias mismas.
Me estaba dirigiendo a las montañas que están a dos días de la capital donde reside la tumba de Belloda y en dónde me quedaré todo un día al lado de ella.
Apenas pasaron unas cuantas horas desde que deje la capital y los muros que la rodeaban desaparecieron de mi campo de visión diciéndome que ya estaba demasiado lejos.
Para evitar que me escucharán guarde el comunicador en el artefacto dimensional junto con mis demás cosas.
Al estar caminando sentí calor en mis brazos por las vendas que aún tenía puestas, "a esta altura mi cuerpo ya debe estar curado por mi propio mana" me quita la venda y en efecto, las quemaduras en mis brazos ya no estaban.
No habían quedado marcas o cicatrices por la ayuda de los médicos y la de mi madre al tratarme las quemaduras.
"Si no controlo la cantidad de potencia que implementó en ese ataque seguiré recibiendo este tipo de heridas repetidas veces" examine mis brazos y ya todo seria normal.
Una brisa cálida de aire me llegó haciendo que mi cuerpo se sintiera relajado y sin preocupaciones, refresque mis brazos acalorados con la brisa.
Mis pensamientos aún estaban en ella cuando recordaban el lugar donde la enterré, un hermoso lugar en lo alto de las montañas donde se había realizado nuestra ceremonia de compromiso y consiguiente nuestra boda.
El hecho de no recordar mi nombre aún me preocupaba, trate de no pensar en eso durante mi camino, pero la curiosidad me carcomía poco a poco.
"Debo tranquilizarme talvez se deba a que no quiero recordarlo, o simplemente no puedo como paso recientemente con Belloda" trate de calmarme con poco éxito.
Me abofeteé el rostro con tal de borrar esa preocupación, "haaa, está angustia me matara tarde o temprano" dije con cansancio así que seguí mi camino.
Escuché el sonido de las pisadas de los caballos que provenían detrás de mí, me quité del camino para dejar que el carruaje pasará, pero en vez de seguir su camino se detuvo un poco más al frente de mí.
El carruaje llevaba a 3 hombres en la parte delantera, dos guardias por lo que noté y el conductor.
La puerta se abrió y de ahí salió una mujer de cabello marrón rojizo y ojos negros, bajo de su carruaje acompañada de un guardia y me volteo a ver.
"Chico, ¿Hacia dónde te diriges?" la mujer me preguntó cuando se acercó a mí, "hacia el pueblo que está a unas horas" le respondí.
Sus ojos se iluminaron y vieron a su guardia y el la miró con ojos de cansancio, "¿Te gustaría que te llevemos?, estoy yendo a ese mismo lugar" me propuso darme un aventón.
"No sé si sea correcto señorita, no la conozco" le contesté nervioso ya que no sabía sus intenciones al proponerme eso.
"Cielos ¿Dónde están mis modales?" Se golpeó la frente con el dedo, "me llamo Calafell, mucho gusto" se inclinó levemente presentándose.
"Aetherius, mucho gusto" me presente yo también, "entonces Aetherius, ¿Dejas que te llevemos?" Me miró directamente a los ojos haciéndolos ojitos de cachorro cuando escuche el llanto de un bebé dentro del carruaje, "oh, parece que ya despertó" dijo ella dándose la vuelta y subiendo al carruaje.
El llanto cesó y volvió a salir, "¿Entonces?"
Me miró, "de acuerdo, muchas gracias" me rendí y terminé aceptando.
Ella me sonrió y me dejó entrar en vez de dejarme al frente con los otros, el carruaje volvió a ponerse en marcha apenas me senté.
A un lado de ella había una cuna tapada dejando libre una parte para que ella lo viera. "¿Te gustaría verlo?" Me preguntó cuando noto que mi mirada estaba posada en la cuna, "no señorita, así está bien" le contesté negándome.
Y sin darnos cuenta iniciamos una conversación "Entonces Aetherius, ¿De dónde vienes?"
"De la capital central" contesté haciendo que se sorprendiera.
"Así que tú eres de los niños que están participando en el evento del festival, ¿Pero qué haces aquí?" Pregunto confundida.
"Estoy yendo a las montañas a visitar a una persona y pedí autorización para poder retirarme del evento, por eso estoy aquí" conteste.
"Ya veo, ¿Puedo preguntar porque viajar solo?, digo ya que ha habido ataques de bandidos recientemente y ver a un niño solo llamaría la atención sobre ellos" explico preocupada.
"No debe preocuparse, mi familia sabe que soy fuerte por eso me dejaron venir solo, además solo serán como mínimo dos o tres días más y luego regresaré" le conté sobre mis planes y lo que haría cuando llegará.
"Oh me gustaría ver eso, pero es una lástima que no vayamos por el mismo lado ya que después de uno o dos días cuando lleguemos al pueblo retomaremos nuestro camino hasta la capital del Este" se quejó mostrándose cansada.
Y sin darnos cuenta seguimos hablando y nos vamos bien, hablamos todo el camino e incluso los guardias y el conductor se unieron a la conversación.
La noche cayó y nosotros habíamos llegado al pueblo y nos detuvimos en un lugar donde había un gremio, aunque no tan grande pero lo suficiente para ser llamado gremio.
"Bueno pues hemos llegado, nosotros iremos a pedir nuestras habitaciones así que acompáñanos" bajo a la bebé cubierta de todo a todo sin poder verla claramente.
Me acerqué al mostrador con la señorita y le hablamos a la recepcionista "buenas noches señorita, me gustaría alquilar una habitación por esta noche" le dije, ella nos miró y nos inspeccionaba.
Después de unos segundos nos sonrió y nos habló, "claro que sí, acompáñame por favor" salió del mostrador y subió las escaleras y yo estaba detrás de ella.
Subimos al segundo piso pasando dos habitaciones más dónde estaba mi habitación.
"Aquí es joven" me abrió la puerta y me mostró la habitación, era grande y la cama era cómoda, "bien, entonces la alquilare por la noche" le dije.
"Entonces regresemos abajo y llena el formulario" camino hacia la salida y la seguí.
Bajamos las escaleras y me encontré con la señorita Calafell, "ya nos asignaron una habitación, así que nos iremos a dormir temprano, nos vemos mañana, buenas noches Aetherius".
"Ther solamente señorita Calafell" le dije mientras subia las escaleras, "solo dime Calafell, Ther, buenas noches" se despidió y siguió subiendo las escaleras.
Llené el formulario y me fui directo a mi habitación.
Dormir fue cómodo sobre todo por el cansancio de estar caminando durante todo un día.
***
Me levanté de la cama y me fui al baño a darme una ducha para quitarme el sudor ya que anoche no lo hice por el cansancio y me fui a dormir directamente.
Salí de la ducha y me cambié colocándome la manga en el brazo y dejando mi cabello suelto un poco húmedo aún.
Baje las escaleras y me fui al comedor, "buenos días joven, ¿Que le gustaría comer?" Me pregunto una camarera, "solo sopa y pan por favor" , apunto mi orden y se fue.
Al poco tiempo llegó con mi comida, "provecho" me dijo y se volvió a ir.
En eso Calafell me habló desde la otra mesa junto con sus guardias, "Ther, acércate siéntate con nosotros" me levanto la mano señalándome un asiento vacío en la mesa.
"De acuerdo" acepté y me moví de mesa, "gracias" les dije con una sonrisa.
"¿Durmieron bien?" Les pregunté.
"Muy buen, ¿Y tú dormiste bien anoche?" Me preguntó, "lo suficiente para retomar mi camino después de un rato cuando terminen de desayunar" le contesté y ella me dio una mirada triste.
"Me hará ver cómo el villano si me sigue mirando así" me burle haciendo que sus guardias se rieran conmigo.
Termine de comer y estuve en esto sentado esperando a que me bajara la comida antes de seguir mi camino.
"Entonces Calafell, debo irme para poder terminar con lo que tengo que hacer y luego regresar con mi familia lo antes posible" me levanté de la mesa y devolví mi plato.
La mujer se levantó, "me alegra haberte conocido Ther, es una lástima que no nos hayamos podido conocer más" me abrazo y me soltó después.
"Gracias por haberme dado un aventó y espero volver a verlos en algún momento" les dije mientras me iba poco a poco mientras nos despedimos.
Cuando me despedí salí del gremio y saqué el comunicador encendiéndolo.
"Hola ¿Me reciben?" Hablé esperando una respuesta, la interferencia sonó y la voz de mi madre me habló "pequeño mocoso, ¿Porque no te has comunicado?" Su voz señalaba a qué estaba enojada.
"Lo siento, me perdí en mis pensamientos y olvide hacerlo perdón" le contesté, "¿Cómo va todo por haya?" Pregunte.
"Todo tranquilo por aquí, los chicos se están esforzando mucho y no han parado de entrenar desde que te fuiste" contesto ella.
"Viola por otro lado está deprimida porque no estás" se escuchó su risa burlona, "tía Altea no diga eso" la voz de Viola se escuchó al fondo.
"¿En dónde estás?" Pregunto, "me alojé por la noche en un gremio que se ubica en un pueblo" contesté.
"Entiendo, ¿Has terminado de hacer lo que querías?" Volvió a preguntar, "no madre, aún falta un poco más de camino para llegar a donde quiero" le contesté.
"Bueno, entonces los dejo que debo ponerme en marcha si quiero regresar lo antes posible como lo prometí" le dije mientras me levantaba de la mesa y pagaba mi comida.
"Entiendo hijo, con cuidado y regresa a salvó" no era un favor era una orden de su parte, "claro mamá, entonces me voy, nos vemos."
"Adiós hijo" la comunicación se cortó y me quite el comunicador y lo guarde en el artefacto.
Bien entonces a moverse otra vez que estoy a unas horas de las montañas y estoy tomara más tiempo para subirlas.
Me alejé del gremio y empecé a caminar.
Las horas siguientes pasaron volando mientras caminaba y llegaba hasta el bosque donde estaba la base de la montaña.
Activé mi radar en busca de bestias peligrosas que pudieran dañarme o atacarme para poder evitarlas cuando en eso sentí una presencia a la distancia a mi derecha.
Trevor por dios, que es esta falta de confianza, sabía quién era por la firma de mana que sentí varias veces antes.
La ignore siguiendo con mi camino.
Me tope con varias bestias débiles que estaba por el bosque y las eliminé sin mucho esfuerzo, busque por lo alrededores buscando por dónde subir ya que el camino que había hace mucho desapareció.
Al no encontrar ninguno empecé a subir agarrándome de los árboles que había en la montaña, el suelo de ablando y resbale, un látigo de la sombra del árbol me sostuvo del brazo y me jalo hacia el para recargarme y descansar.
Saque mi mochila del artefacto y saque la cantimplora de agua y bebi, "no recordaba que fuera tan difícil subir" suspire, mis piernas dolían por la fuerza que hacía sin colocar mana en mi cuerpo.
Últimamente he confiado mucho en el mana para reforzar mi cuerpo y eso era un grave error de mi parte, al usar mucho el mana para fortalecer mi cuerpo abandonaba la idea de ejercitar mi cuerpo para conseguir más aguante y fuerza propia sin ayuda del mana. Y está subida es un ejercicio para mí cuerpo
Seguí subiendo la montaña y encargándome de bestia que me atacaban cansándome más.
Ya era tarde y el sol está a una hora de ocultarse así que decidí asimilarme para subir la montaña más rápido.
El esfuerzo que hice en mi cuerpo me dejó cansado y al presionar mi cuerpo con la asimilación hizo que mis piernas dolieran cuando di un salto hacia un árbol y luego a otro.
Subir el resto de la montaña, zigzagueando saltando entre árboles y apoyándome en la magia de sombras para crear plataformas donde no había donde apoyarme.
La hora paso y la noche cayo, pero yo ya estaba en lo alto de la montaña, me sente un rato para descansar mi cuerpo dejando ir la asimilación.
Me quite la manga y la dejé a un lado, saque mi mochila junto con la comida, reuní leña y la junte, chasquee mis dedos y chispas salieron encendiendo el fuego.
Con mi cuerpo ya descansado decidí cambiarme de ropa así que extendí mi sombra lo más que pude y me forcé a crear una burbuja a mi alrededor junto con el fuego.
Cerré mis ojos y empecé a mover las sombras, la burbuja se creo después de un rato dejándome más cansado, la luz que generaba el fuego no se apagó así que empecé a quitarme la ropa y ponerme la nueva.
Deje ir mi pensamiento con el cual mantenía la burbuja y lentamente regresaba al suelo y de regreso a mi sombra.
Saque mi saco de dormir y me recosté encima de ella, mire el cielo, oscuro y brillante a la vez, las estrellas cambiaban de color y parpadeaban, está vista le encantaba a ella.
Cerré mis ojos y me dormí dejando el fuego encendido con el sonido de los grillos sonando alrededor.
***
Después de levantarme aguardé todas mis cosas y empecé a caminar buscando el lugar donde estaba ella.
Tarde cerca de una hora en buscarlo por la cantidad de árboles que crecieron por toda la montaña, había un espacio entre todos los árboles creando un círculo con un campo de flores de muchos tipos.
En medio había una lápida grande, más grande de lo que debía ser o de lo que recordaba.
Me acerque, me arrodille y quite las raíces que lo envolvían y leí las letras que estaban gravadas
"Aquí descansan el matrimonio más hermoso y feliz de la hija, hermana, amiga y esposa ... ..E... Acompañado del hijo, hermano, amigo y esposo E....".
Me sorprendió cuando note que lo que parecía ser mi nombre el cual estaba grabado aquí, una risita salió de mí, así que me enterraron junto a ella.
Su apellido y mi nombre estaban borrados por el desgaste del tiempo "tenía esperanzas de que aquí pudiera saber mi nombre, pero parece que me equivoqué" dije con una sonrisa triste.
Me levanté y retrocedí un poco, cerré mis ojos y active el radar, busque y busque hasta que lo encontré.
Use las sombras de los árboles para atacar y obligar a que saliera de su lugar mientras yo también me movía hasta donde estaba.
Las hojas de los árboles se movían acompañados de los ataques de mis sombras, entonces la mire.
Ava estaba esquivando los ataques mientras se movía, cuando tocó un árbol su sombra se movió y agarro su brazo y después su pierna impidiendo que se moviera.
Aterrice a un lado de ella sin mostrar signos de atacarla así que solo la mire y ella me miró con una cara de vergüenza.
"Hola Aetherius, que coincidencia" me sonrió nerviosa, "parece que los Descendientes y Trevor no me tienen confianza" dije tocando mi frente en forma de decepción.
Solté a Ava y ella solo se sobo el brazo, "¿Te lastime?" Le pregunté, "Para nada, y disculpa por seguirte, fue Trevor quien me pidió de favor que te cuidara en caso de ser necesario así que te seguí muy de lejos" respondió.
"Apenas voy subiendo la montaña, y vaya que es alta ya que me tomo mucho tiempo en hacerlo" miro hacia un lado y arriba donde las nubes casi tocaban la copa de los árboles.
"Escucha Ava, entiendo el punto y siento que me hayas tenido que seguir hasta aquí, pero me gustaría que durante todo el día me dejaras solo y si te es permitido ¿Podrías alejarte lo suficiente?" le hable en forma delicada y respetuosa.
"No pretendo solo darte una palmada en la espalda y mandarte a casa así por qué así, así que solo te pido eso."
Me miro durante un rato y bajo su cabeza derrotada, "entiendo, estaré alejada lo suficiente, solo hazme alguna señar si ocupas ayuda, además ocupo comer algo" contesto, saqué mi mochila y le di una ración de comida, "toma esto, por las molestias causadas" la tomo.
"Gracias, entiendo y ahora me alejaré" se alejó y dio un salto hacia atrás, cerré mis ojos y sentí como caía fuera de la montaña hasta caer enzima de un árbol y recostándose en una rama gruesa empezando a comer.
"Vaya ahora no solo siento su sombra, incluso puedo ver su silueta y lo que hace, pero en negro solamente" suspiré y me alejé del lugar hasta regresar a dónde estaba.
Quité las plantas alrededor de la lápida y me senté frente a la lápida y con un cepillo grande y agua empecé a limpiar la lápida, estaba llena de musgo y raíces por la humedad del clima aquí arriba.
Saque un cincel con punta y empecé a tallar solo su nombre para que se mirara más limpia, menos mi nombre el cual no recordaba cuál era y mucho menos nuestro apellido.
Ese hecho me hacía doler el corazón, olvidar algo así era sumamente doloroso y caótico en mi interior haciendo que el sentimiento de tristeza me ganará y empezará a sollozar.
Pasé mi dedo por su nombre tratando de recordar más cosas aparte de nosotros o de mi pero no logré hacerlo.
Antes de salir de la capital pase a una florería y entre tiendas buscando una guitarra y buscado una flor extraña que a ella le encantaba.
Después de un tiempo logré encontrar lo que buscaba así que lo saque de mi artefacto, una bolsa con semillas de flores llamadas flores de Estrella Lunar.
Eran raros ya que no se sabía cómo mantener viva la flor sin que de marchite
Planté la semilla ya que eso era lo único que logré obtener después de una larga búsqueda.
Cabe un agujero y metí una semilla y a un lado cabe otros agujeros y metí el resto de las semillas en cada uno, les heche agua para que florecieran.
Saque mi guitarra y la deja un lado, esto era un proceso largo así que espere durante mucho, mucho tiempo mientras meditaba para dejar pasar el tiempo.
La noche estaba cayendo, el sol de ocultaba y la luna tomaba su lugar.
Cuando la luna estuvo en su punto más alto me iluminó completamente, el suelo debajo de mi empezó a brillar con la luz de la luna.
"Ya está empezando" tomé la guitarra y empecé a tocar haciendo sonar la nota musical que practique mucho solo para ella.